Jorge Bravo Sayago
Lo de este servicio, si se le puede llamar así, es una vergüenza. Una semana llamando para intentar coger cita para empadronar a una recién nacida y no lo cogen. Vamos presencialmente y según la persona que había “no coge el teléfono porque está ella sola”. No nos puede dar cita porque las abren los lunes y tampoco nos puede “hacer el favor de atendernos”. Nos dice que si no viene la siguiente cita (a la cual le quedaban 45 minutos para llegar) a lo mejor nos podría atender, cuando no había nadie más a quien atender. Esto no puede funcionar peor, si la cita se coge por teléfono aseguraos de tener a alguien para recepcionar esas llamadas, y sino permitid cogerla de forma online. No se puede estar mareando a los ciudadanos de esta forma.